
En el 1×03 de “The Vampire Diaries”, “Friday Night Bites”, La Rubia Tonta se despierta alterada en la cama como si le hubiera hecho el amor un vampiro la noche anterior… Oops, that´s exactly what happened. O eso, o a Boone le mola demasiado el sado-maso. La Rubia Tonta se levanta como pisando huevos, con una ligereza extrema, para que Boone no la escuche levantarse, por si le da por morderle otra vez el cuello. La chica avanza pasito a pasito hacia la puerta y uno solo puede pensar en cómo disfrutará Kevin Williamson con estas min-películas de “terror” semanalas. Estas “Crónicas vampiras” parecen el proyecto perfecto para el guionista: romance adolescente y pildoritas de terror. Pero, por algún motivo, no acaba de encontrarle el punto. “The Vampire Diaries” es un producto sin alma que deambula en busca de una, lo mismo que Boone busca el cuello de la chica… porque Boone se ha despertado (¡susto!) y le pone a La Rubia Tonta su sonrisa “soy un malo de televisión sobreactuando”. La chica le lanza cosas a la cara a Boone, la lámpara y hasta una almohada. Boone pone cara de “¿En serio, una almohada?” y le dice que esto podría haber ido de otra forma justo antes de lanzarse a por ella. Créditos… lo que en la CW significa “cortinilla informativa del título de la serie de dos segundos de duración”. Ok.
La psíquica de Bonnie (que será psíquica pero tiene menos poder que la gran Chenae, y ella lo sabe) le dice a Joey 2.0 que se tome con calma su relación con Vampson, que ahora está soltera por fin tras mucho tiempo y que debe vivir “la vida loca” (se lo dice con otras palabras, pero el mensaje viene a ser este). Joey 2.0 le dice que ya sabe que ella no es de ese tipo de chicas y que le diga a qué viene esto. Bonnie le dice que el otro día tocó a Vampson accidentalmente (claro, claro, tocamientos accidentales, así lo llaman ahora) y que tuvo “un mal presentimiento”. Al aparecer por allí Vampson, la chica se larga con tanto disimulo como Bart Simpson cuando se fotocopia el culo. Es decir, ninguno. Vampson dice que “no le caigo muy bien” y Joey 2.0 dice que es porque no le conoce. Que en cuanto le conozca “she´ll love you”. Claro, con esa personalidad desbordante que tiene Vampson, con sus poses misteriosas y sus anillacos del siglo XVIII, cómo no amarle.
Ozzie de “90210” y el ex de Joey 2.0 ven a Vampson y Joey 2.0 desde la distancia y rajan de ellos. El que raja, mayormente, es Ozzie, que describe a la perfección la acción romántica de la pareja de la serie: “Mira, ahí va tu chica y su nuevo novio. ¿Qué harán esos dos aparte de caminar, caminar y caminar?”. Nada de nada, Ozzie. Pá mi que Vampson no va a tocarle un pecho hasta la cuarta temporada. El ex de Joey 2.0 le dice a Ozzie que se calle la boca, pero Ozzie, que tiene ganas de jarana, le lanza la pelota de fútbol americano con mala leche. Vampson, a lo Spider-Man, se vuelve y atrapa la pelota como el mejor jugador de la NFL de la historia (que no tengo ni pajolera idea de quién es, ¿John Madden, el de los videojuegos?). Luego se lo lanza a Ozzie de vuelta y casi le desgarra las manos al chaval. La peña se queda flipando. ¿Este tío no ha visto “Smallville”? ¡No puedes ir alardeando de tus super-poderes o te van a pillar, Vampson!
Tras esa apasionante secuencia, veo en la pantalla que Kevin Williamson no ha escrito éste capítulo y que el mismo ha sido dirigido por John Dahl, un señor que escribió esa pedazo de película que es “Red Rock West” (con una inconmensurable Lara Flynn-Boyle pre anorexia) y que ha dirigido episodios de otra serie vampírica, “True Blood”. Veremos si ofrece buenas maneras. La opening sequence, ese pequeño segmento “de terror” de cada episodio, estuvo bien planteada y rodada aunque la resolución me pareció algo chapucera (cosa más atribuible al guión que a su labor tras la cámara).
“7 de diciembre de 1941”, es la fecha que le da Vampson al Profesor Capullo cuando éste pregunta por Pearl Harbor en clase. Amo Perl Harbor. No la batalla donde se produjeron tantas víctimas, sino la película de Ben Affleck, Josh Hartnett y Kate Beckinsale. Claramente infravalorada. Luego empieza un pique absurdo entre el Profesor Capullo y Vampson, que más que “The Vampire Diaries” parece “Saber y ganar”. El profe le pregunta veinte mil fechas: “La caída del muro de Berlín, la Ley de los Derechos Civiles, el asesinato de Kennedy, el asesinato de Martin Luther King, el asesinato de Lincoln, Roe contra Wade, Brown contra Borrad, la batalla de Gettysburg, la guerra de Corea”; y Vampson clava una tras otra: “1989, 1964, 1963, 1964, 1865, 1973, 1954, 1863, de 1950 a 1953”… “¡Já! La guerra de Corea acabó en 1952” se ríe el Profesor Capullo todo feliz… pero Vampson le corrige: “La verdad, señor, es que acabó en 1953”. El profe le pide a la clase que lo busque en el libro, y Vampson estaba en lo cierto. La clase aplaude a Vampson y al profe se le queda el culo torcío. ¿No molaría que el profe éste fuera un aliado vampírico de Boone o algo así? Y, respecto a los super-conocimientos de Vampson: ¿vampiro y, además, empollón? I didn´t see that coming.

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