Fuera de onda ("Clueless"): Amazing! (by Gabi)

Un día normal por tanto en la vida de Cher consiste en elegir un conjunto de ropa de su gigantesco vestidor, bajar cual Reina de Inglaterra la enorme escalera de su casa (la del Titanic una mierda a su lado), decir alguna chorrada a su padre y/o al servicio e ir a saludar a sus súbditos. O lo que es lo mismo, a sus compis del High School. Cher es guay. Pero me gusta más el término anglosajón: es toda una queen bee. O sea, una abeja reina.

Bueno, pues Cher tiene una best friend que se llama Dione, y luego una panda de mamarrachos que son básicamente sus esbirros pijos, y que iré mencionando si considero que tienen algún interés. Que no creo. Dione es tan divine como Cher, pero en versión afroamericana. Tiene un novio con el que sale y se le pelea constantemente. Pero ya lo dicen que los amores reñidos son los más queridos. No, no me creo eso de verdad, pero es por decir algo. Oh, y también tiene un hermanastro (Paul Rudd), hijo de una ex del padre al que han cogido cariño y dejan pululear por Beckhimham Palace.

La vida de Cher is totally awesome. Su único lunar, además de ser huérfana de madre, es no tener el carné de conducir. Porque recordemos que al contrario que aquí, en USA los teens conducen desde los 16 y para ser guay el coche es un accesorio indispensable. Pero es que la pobre es un peligro al volante, y no hay manera de que apruebe. Peor que yo, y eso que me llevó cinco intentos sacar el carné. En serio, ¿por qué tuvieron que ponerse a cruzar esos putos boy scouts justo cuando yo pasaba por ahí? ¿¿¿Qué monitor desalmado hace cruzar a sus Gremlins cuando ve un coche de autoescuela en el horizonte??? Moving on.

Everything is wonderful, pero Cher está algo aburrida. Necesita una misión. Y la misión aparece en forma de adolescente grunge (Nirvana hizo un daño estético irreparable a los teens noventeros) con lamentable gusto en vestuario y el pelo teñido con Farmatint. Eso es mucho decir teniendo en cuenta cómo se vestía en los 90. Pero es que además la nueva es un poco mucho Pardo Bazán, la pobre no hay por donde pillarla. Sí, she is Brittany Murphy. Pre operaciones, pre Ashston Kutcher.

Pero el cambio físico es solo el principio. Brittany tiene que convertirse en una piji guay, y además encontrar un novio. Un momento, mucha preocupación con la Pardo Bazán pero Cher tampoco tiene pareja…

No será por falta de candidatos, pero es que claro, Cher es guay y necesita un novio guay. Por hacer juego, como el traje chaleco a cuadros. El pijo que se cree Brad Pitt y se queda a Zack Morris quiere temita con Cher, pero él no le sirve.

Mejor lo intenta liar con Brittany de una manera, sinceramente, un poco torpe. Vaya Celestina más cutre. Y encima el tío no lo pilla y cree que sí es correspondido. Esto os lo explico porque luego da para una serie de líos.

En estas aparece por clase un pitufo que se cree James Dean. O Jason Priestley. Que para el caso es un hobbit que se cree un actor de un hit culebronero de los noventa que se creía una estrella de cine de los años 50. ¿Confuso? You bet.

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