Camila Mendes (Riverdale) protagoniza Upgraded, una especie de El Diablo Viste de Prada centrada en el mundo del arte. ¿Qué tiene de bueno Upgraded en comparación con la película de Anne Hathaway? Que no tiene principalmente a los amigos petardo y al novio capullo.
Ana Santos (Mendes) vive en casa de su hermana y su cuñado, algo que a este no le hace mucha gracia. Viven en un apartamento pequeño y la falta de intimidad es preocupante. La sorpresa, al menos para mí, ha sido Andrew Schulz que interpreta al cuñado. Lo mejor de la película. Me he partido el culo. He buscado y resulta que es cómico de stand up y tiene un podcast, así que ya tengo tarea pendiente.
La que está muy graciosa también es Saoirse-Monica Jackson (Derry Girls), aunque un poco desaprovechada. Y también sale Rachel Matthews (Feliz Día de tu Muerte) haciendo de una mean girl corporativa y se le da estupendamente bien.
Aunque se trata de una comedia romántica, lo que menos interesa es el romance. Es divertido ver como Ana intenta escalar profesionalmente, mete la pata y comete errores más que su enamoramiento con el chico al que ha conocido en el aeropuerto, aunque gracias a este conoce a la madre de él (Lena Olin, Alias) y a Julian (Anthony Head, nuestro Giles de Buffy). Esto es algo que ya le pasaba a la película de Anne Hathaway, pero aquí se acentúa más.
Quitando la parte romántica, todo lo demás encaja muy bien y tiene mucha gracia. Camila Mendes está muy correcta, pero es verdad que se apoya mucho en los secundarios que todos son unos roba escenas. Aunque sin duda la que más destaca es Marisa Tomei con su versión edulcorada (aunque tampoco mucho) de Miranda Priestly.
brenda forever 
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