Samara Weaving es una de esas actrices que, simplemente, cae bien. Aquí nos gusta mucho y es que, cada vez que la vemos, suele estar o muy bien ella o muy la película en la que sale o ambas cosas a la vez, véanse los casos de Noche de bodas, La babysitter (no sé si se llamaba así, pero ya me entendéis), su participación en Scream VI (la que, parece ser, borrarían del canon si pudieran…). En fin, que Samara mola. Así que tenía muchas ganas de ver esa La conductora (Eanie Meanie en el original) que han estrenado en Disney + y peli de la que no sabía nada hasta que no estaba ahí, delante de mí, lista para mostrarme todo lo que tenía en cuanto le diera al play. Así que le di al play y…
… y, bien, a ver, supongo que si tuviera 15 años me habría flipado. Lamentablemente (o no tanto) para mí, ya no los tengo, así que este megamix de persecuciones en coche, disparos, secuencias estrambóticas (tengamos una discusión en un cuarto decorado con pósters de mujeres negras desnudas just because) y personajes chiripitifláuticos me ha dejado un poco «el pecho frío», que diría el famoso YouTuber de comida Tano Villar. Hubiese agradecido, no ya un poco de pausa, que no tiene por qué (Baby Driver, por ejemplo, me encanta, y no deja de acelerar en ningún momento), sino un poquito más de historia y personajes con los que poder empatizar. Me ha parecido todo tan over the top que no me he creído nada (bueno, a Andy García, sí, que me tiene encadenao, ¡qué grande como el alcalde en la Ghostbusters de 2016!)
En fin, que a ver si la Samara me elige mejor los proyectos en el futuro, no quiero yo que le pase como a Jessica Roth, a la que no he vuelto a ver en cine desde hace ya ni me acuerdo. Os dejo un vídeo de algo que ahora mismo no sé qué es porque aún no lo he buscado, pero espero que esté guay:
brenda forever 
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