Yo quería escribir una reseña rapidita de Culpa Mía: Londres (My Fault: London, 2025), pero es que me ha pasado una cosa… que es que… a ver cómo lo digo… MENAMORAO DE ESTA PELI. Sí, qué pasa. Me flipa My Fault London. Así que me he puesto a investigar y tengo un par de datazos que contaros de la peli, pero antes de eso sabed que este no es un remake de la Culpa Mía española, sino una nueva versión del libro de Mercedes Ron (en los créditos del final dicen «basado en la historia de Mercedes Ron», sin mencionar la película de Domingo González), así que la competición que establezco en el título no es ORIGINAL vs REMAKE, sino entre UNA ADAPTACIÓN DEL LIBRO vs OTRA ADAPTACIÓN DEL LIBRO.

La historia de Nick y Noah (mantienen los nombres, yessssss) es, por supuesto, la misma: «pez fuera del agua» (la cantante y actriz Asha Banks, absolutamente creíble, aquí una americana que se muda a Londres) que se enamora de su hermanastro pijazo y bad boy que esconde un corazón de oro (Matthew Broome, cumplidor, pero no tan bien como su compañera, con pelo del primer Cristiano Ronaldo del Manchester United). La ejecución de la historia es, however, muy diferente.

Para empezar, está todo mucho más matizado, es todo más sutil, mucho mejor desarrollado; de hecho, el guión encuentra formas bastante ingeniosas de llegar a las conclusiones del libro/peli española y creo que esto sí que es adaptar un libro como Dios manda. Supongo que sin las cadenas de «máxima fidelidad, casi esclavismo» al texto original de la versión nacional, aquí la guionista Melissa Osborne (también la autora de Mi año en Oxford de Netflix) tiene la libertad para improvisar y, en mi opinión, mejorar un montón de cosas de la historia de base. Por ejemplo, cómo Noah descubre que Nick es su hermanastro, cómo este abandona a la chica en «mitad de la nada», cómo Noah se entera y va a la fiesta secreta de Nick, cuando Noah «se queda encerrada» y recuerda su pasado, el papel más «padres de verdad» de los padres, la aparición ya en la primera peli de la madre de Nick (la relación entre ambos nos ayuda a entender al personaje)…

Hay mil cositas que no hacen sino mejorar las ideas primigenias (el ex de Noah no es un pelele y su presencia en la trama está mejor explicada, por qué Nick anda en lo de los coches también, los miedos de Noah también…). A mí esto me ha parecido fascinante, ir viendo cómo una historia no especialmente original que ya conocía podía contarse mejor y de manera hasta sorprendente. A lo mejor se les va la mano con ese final que es casi como si la peli cambiara de género (Jason Flemyng da DEMASIADO miedo como padre de Noah), pero todo lo demás me parece una mejora sustancial. ¿Lo más importante de todo? La química entre los protas. A estos dos me los creo, se gustan porque se gustan, no porque lo marque la página 15 del guión. Curiosamente, los Nick y Noah de Culpa Mía: Londres se magrean mucho menos que los de la original, pero me creo mil veces más su deseo. En resumen, han tuneado el coche y lo han dejado guapísimo. Gracias a la guionista y a las directoras Charlotte Fassler y Dani Girdwood (el dire de la española era un señor, a ver si…).

Venga, esos dos datazos que prometí: el primero es que es el debut en cine del prota, la prota y las directoras (vale, Asha Banks ya participó en La flauta de Mozart, pero de secundaria). ¡Me alucina que la primera peli les haya quedado tan bien! De acuerdo que van sobre seguro con esa base de fans detrás y Prime Video cuidando el producto, pero yo aquí he detectado talento. El segundo es que Asha Banks ya había hecho una serie teen basada en libro y parece interesante, ¿alguien la ha visto? Asesinato para principiantes (A Good Girl’s Guide To Murder, 2024) de Netflix.
Me ha gustado tanto el soundrack de la peli que os lo dejo aquí debajo, todo temazos, todo hits (incluido uno de la propia Asha Banks), ¡cómo me gusta la canción de Lily Allen de Londres que no conocía! La letra tiene su miga. Sí, vale, amo Londres, es mi ciudad favorita del mundo, y puede que eso haya influido un pelín (¡pero solo un pelín!) en esta review tan positiva. He leído cosas como «el remake que nadie había pedido» y similares… No sé, si te gustan las películas teen con buenas interpretaciones, bien rodadas y con un guión potable, yo le daría una oportunidad. En junio de este año empezaron a rodar la secuela… ¡y yo quiero que empiece a rodar en mi pantalla YA!
