
El otro día vi «Wild» y tengo un mensaje para el director y la protagonista de la peli: «No os flipéis tanto». Vale, puede que la culpa fuera mía, que iba en busca de otra «Into the wild» (os recomiendo el libro en el que se basa la peli, precioso, buenísimo) y me encontré con un puzzle loco más descompensado que el precio de Illarramendi… pero el post no va de mi gusto o falta del mismo; sino de nuestra buena amiga Reese Witherspoon. Y de cómo la chica se ha labrado una carrera al margen de ese cine teenager que tanto disfrutamos por aquí.
Sí, somos conscientes. La Reese’s Pieces ha protagonizado pelotazos teen muy a tener en cuenta. Ahí está esa «Cruel Intentions» junto a Sarah Michelle Gellar y Ryan Phillippe, cada día que pasa más de culto que el anterior (dio pie a varias secuelas, en una de las cuales sale… ¡Amy Adams! ¡Atiende!); y esa aspirante a tv-movie que era «Pasión obsesiva», donde Mark Wahlberg se pone de un pesado que no se puede aguantar, persiguiendo tanto a la señorita Pieces como a Alyssa Milano.
A partir de aquí, la Witherspoon decide que lo suyo son los Oscar, las cosas indies y la elegancia. Que cosas teen, sí; pero de canto. Y, a ser posible, de culto. Como esa «Pleasantville», película maravillosa con dos teenagers transportados a un mundo en blanco y negro; o esa «Una rubia muy legal» y secuela, que pide a gritos una tercera parte para vender la trilogía en un pack que no lo salta ni Gervasio Deferr. Y qué decir de «Election», una peli que nos sigue fascinando. Si hubo un papel para el que nació Reese’s Pieces, ese fue el de la empollona repelente de su clase que pisa cuantas cabezas (y vidas) sean necesarias para conseguir sus objetivos. ¡Si es que te pones a repasar y no ha dado puntada sin hilo en su carrera!
A partir de aquí, las «películas serias», la de «yo he venido aquí a ganar la estatuilla». Recordad: «La feria de las vanidades», «En la cuerda floja» (por la que se la llevó), «Expediente Anwar», «Agua para elefantes», «Mud», «Condenados», la mencionada «Wild» y las que le quedan. Lo curioso de la chica es que, pese a haberse consolidado como «actriz seria», se las ha ingeniado para haber trabajado, y bastante, la comedia romántica. No tanto como Jennifer Aniston o Katherine Heigl, pero tiene ahí sus títulos: «Sweet Home Alabama», «Ojalá fuera cierto», «¿Cómo sabes si…?» y «Esto es la guerra» (una de las peores películas que he visto en mi vida, algo así como la versión chunga de «Señor y Señora Smith»).
Aunque de todo esto nosotros nos quedamos con su papel de hermana de Rachel en F·R·I·E·N·D·S. Debajo os dejamos un vídeo:
PD. No he tenido el gusto de ver esa «reinterpretación» de Caperucita Roja en plan moderno… ¿alguien la ha visto?
PD. ¿¿Y alguien sabía de la existencia de esta peli de Reese junto a Paul Rudd??
PD 3. Más guías rápidas de actores y actrices que nos gustan, pinchando aquí


http://www.yoqueriatrabajarenelcronica.com/los-cuentos-de-hadas-pueden-dar-miedo/
Aquí hablo un poco de la peli esa de Caperucita, mola mucho pero es chunga como ella sola. La de Paul Rudd la vi pero no me acuerdo de mucho. Creo que él iba a ver a su novia y el Reese lo llevaba en coche y entonces empezaba la química entre ellos o algo así y que él era un desastre al que todo le salía mal.
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Yo he visto también esas dos. La de caperucita no me gustó nada, pero la vi hace unos 10 años y supongo que quería otra Sweet Home Alabama (que me sigue encantando, oye). La de Paul Rudd también, sin más.
Pleasantville es genial. En Election lo borda. Pero en La cuerda floja está increíble. Me encanta Reese, qué le vamos a hacer.
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Es una actriz muy buena, para mí no hay duda. Lo que pasa es que le tengo manía desde que leí un libro de Kevin Smith en el que contaba cosas no muy agradables de ella…
Pero es güena, sip.
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La de Paul y Reese no promete mucho, pero la de la Caperucita sí que tiene buena pinta. A ver si la encuentro por ahí.
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