Make/Remake: El Padrastro

Vemos primero el remake y luego el original. Y después los comparamos, si no pa’ qué. Ojo, aquí hay spoilers a tutiplén, estamos ya cansados de ir pisando huevos en los comentarios de películas, ¡a verlas antes de leer los posts, hombre ya!

El Padrastro, tanto la de 2009 como la de 1987, va de un señor que ama más a «LA FAMILIA» que un votante de VOX. El tipo, un sociópata de mucho cuidado, va saltando de familia en familia porque al principio asume el rol de pater familias y está de subidón en plan «este es mi rollito» pero luego, como no los puede soportar más, se los carga y hala, a por otra unidad familiar que destrozar. La de 2009 mola bastante más que la de 1987, creo que consigue mejor mantener la tensión hasta el final, sobre todo al centrar toda la acción del film en la familia y la casa, aquí no hay investigadores privados o psicólogos externos que quieren meter sus narices en el rollito ese raro que se trae nuestro Padrastro como en la de 1987… mucho mejor reducirlo (y retorcerlo y reconcentrarlo) todo a la burbuja «familiar». Los trapos sucios hay que lavarlos en casa, esto siempre se ha dicho. Además, el Padrastro es implacable, sí, pero es un ser humano, no como el de la original que al final se convierte en Terminator…

La de 1987, eso sí, tiene sus virtudes. Vale que el acabado formal sea algo más torticero, pero esto también le da una autenticidad y cierta identidad que la distingue de la algo más genérica de 2009. En la original, por ejemplo, tenemos a un Padrastro mucho más desencadenado, y ese Terry O’Quinn (John Locke en Perdidos) da muchísimo juego en los momentos en los que se le va la pinza. Mucho mejor que el Bland Padrastro del remake, Dylan Walsh. Una diferencia grande entre ambas cintas es que en la original tenemos a una hija de familia que no se fía del Stepfather mientras que en la de 2009 tenemos a Penn Badgley, que ahora lo piensas y dices «el psicópata de You desconfiando de otro psicópata» y claro, tiene su gracia. Además, la relación de Badgley con Amber Heard es bastante creíble, le dan mucho tiempo en pantalla y están ambos como pareja perfectamente integrados en el desarrollo de la trama.

Venga, al grano, ¿cuál tengo que ver? Pues la de 2009 de cabeza, que no solo coge los elementos que funcionan de la original y los potencia, sino que además es un thriller la mar de competente por sí solo.

Como curiosidad, sabed que hicieron una secuela de la original en 1989 en la que esta vez Locke, con nuevo peluquín, acosaba a Meg Foster (Masters del Universo) y Jonathan Brandis (el chaval tristemente fallecido de SeaQuest o La historia interminable II). ¡A saber cómo resucitan a Locke, que en la primera acaba como un pincho moruno! Me pica la curiosidad, la verdad…

El Padrastro de 2009 la acaban de subir a Netflix (al menos, el irlandés)
El Padrastro de 1987 la podéis ver entera aquí
El Padrastro 2 de 1989 la podéis ver subida a YouTube en 9 cachos aquí

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